De vez en cuando dejaba entreabierta la puerta, para que la podobromhidrosis, la vulgar pecueca, de mis tenis viejos ventilara y el cuarto tomara un ambiente menos pesado.
Cada semilla interna está rodeada de una mota de color amarillo, que es directamente comestible, aunque tiene un sabor y olor fuerte (similar al olor a patas o pecueca).
Por más talcos, cuidados y menjunjes; algunos adquieren un olor a pecueca y sacarse los zapatos en público o en privado arruinaría hasta un mal matrimonio.