La industria neocelandesa, de moderado desarrollo, se concentra en la producción de alimenticios, maquinaria, textiles, automotores, cementos, curtiembres, vidrio, energía, siderurgia, petroquímica y productos derivados de la explotación maderera.
Para establecer la relevancia de la calidad de las colmenas, se caracterizaron de acuerdo a una estandarización internacional (neocelandesa) como buena o estándar, regular y mala (cuadro 1).