Sus 60 breves historias sobre libros, coleccionistas de ellos, editores, lectores, maquinadores y especuladores nos proporcionan una lectura no sólo amena sino brillante y muy divertida.
Siempre que se inicia una buena obra, hay maquinadores listos para entrar en disputa sobrecuestiones de forma o detalles técnicos, para apartar lamente de las realidades vivas.