Pero más allá de cuán diferentes puedan aparecer a primera vista, todos ellos tienen grandes rasgos en común, características que alimentan su conducta manipuladora.
La utilización de la palabra teoría - no sé si por ignorancia o directamente por maldad manipuladora - para intentar rebatir la evolución es sencillamente patético.
Es decir, el peligro de hacer depender la verdad del ser en sí de nuestro conocimiento según nuestra sola razón, altamente manipuladora cuando se interpreta su irrestricta racionabilidad.