La persona en un lenguaje como si estuviera en clave, críptico, obscuro o nebuloso, con palabras y frases insubordinadas entre sí, muy difícil de entender o descifrar.
Siempre se cuestiona, y se le pide que se insubordine y se revele contra el poder, algo imposible de suceder, si no se crean las situaciones detonantes.