La distribución de las temperaturas sobre la superficie terrestre se representa gráficamente mediante mapas de isotermas o líneas que unen puntos que tienen la misma temperatura.
Típicamente barroco, este revoco se caracteriza por falsear otras arquitecturas a modo de trampantojo, realizado con incisiones, acanaladuras, esgrafiado o simple pintura, imitando gráficamente sillerías, molduras y ornamentos.
El antetítulo, como lo menciona el autor, es un título de secundaria importancia, donde gráficamente se encuentra ubicado antes que el título principal.