La deficiencia de yodo causa disfunción de la glándula tiroides (incluido el bocio) y diversas irregularidades cutáneas, gastrointestinales y neurológicas.
El 36.7 % de esos niños tenían bocio y de estos niños el 4.3 % tenían un hipotiroidismo subclínico y el 7.3 % presentaban anticuerpos antitiroideos positivos.