Un maestro debe tener una formación moral firme, basada en valores inalienables y no una actitud relativista que justifique cualquier acción de violencia.
Es más apropiado llamar la modernista que moderna, tomando como su problema (y su oportunidad) la fragmentación y yuxtaposición de los valores culturales.
Como que tampoco veo incongruencia alguna entre estos valores y las tradicionales cuatro virtudes cardinales cristianas de prudencia, justicia, fortaleza y templanza.