Posteriormente se comprobó el movimiento de agua empleando un osmómetro adaptado con diversos tejidos vivos como membranas semipermeables (peritoneo y vejiga, 4).
Finalmente, lo que fueron las arterias umbilicales, también se van a cicatrizar y formar lo que son los ligamentos umbilicales laterales del peritoneo.
También se encuentra presente, y en cantidad suficiente, en el líquido cefalorraquídeo, líquido amniótico, líquido pleural, sinovial, peritoneo y pericárdico.
La colocación tunelizada más habitual es en hipocondrio derecho, con un trayecto tunelizado que atraviesa el peritoneo hasta llegar al hemiabdomen inferior izquierdo.