Se ejecutaba con motivo de una ceremonia pantomímica surgida en las diversas naciones africanas al elegir un rey todos los años, y celebrar la elección en ciertos casos.
Las danzas aborígenes eran de carácter mágico-religiosas: bailaban para la fertilidad, bailes sagrados, recreativos, pantomímicos, danzas guerreras; se danzaba para todo con un sentido religioso, esotérico y simbólico.